jueves, 21 de abril de 2011

Reflexiones de semana Santa


Esta noche hemos celebrado la Eucaristía junto a la comunidad de la parroquia santa Inés en Valdivia (Chile), con un pequeño grupo de hermanos y hermanas, en la oscuridad de la noche y en medio de un fuerte temporal que azota nuestra región del sur de Chile, y sin luz, hasta hace un poco rato atrás. Al finalizar la Misa, hicimos un pequeño momento de adoración eucarística, acompañando al Señor en la triste noche de Getsemaní. No sé porque me causa siempre un sentimiento de mucha congoja y abatamiento. El ver como poco a poco todos se van retirando en silencio y tal vez con estos mismos sentimientos en el corazón. Me pregunto si habré podido expresar los mismos sentimientos de Jesús en la Última Cena, después del lavatorio de pies que realizó con sus discípulos y que como sacerdote repito. Nunca sino en semana santa y en esta tarde, en particular me siento más instrumento de Jesús y al mismo tiempo tan débil en este ministerio que se me ha confiado, sin merecerlo.

Quisiera que podamos seguir a Jesús con libertad del corazón, sin ambiciones, ni envidias, en que todos podamos sentirnos hermanos unos con otros, que nos podamos mirar a los ojos, sin importar de donde venimos y lo que hacemos. ¿Cuántas semanas santas tendrán que pasar para que el ideal cristiano se cumpla en nosotros?. Si cada uno pudiera abrir su corazón y pudiera ver a Cristo en los demás y por lo tanto respetarlo y quererlo como si del mismo Jesús se tratara, podremos decir que el Reino de Dios está cerca.

A todos y todas quienes leen este blog habitualmente, o que quizas primera vez que lo hacen. A las personas que me conocen, mis amigos y amigas. A aquellos a quienes no conozco y de algo les ayuda los comentarios a los evangelios, un abrazo fraterno de un cura que quiere solamente transmitir el mensaje de nuestro común maestro: Jesús. Con aquellos de ustedes que comparto el ministerio sacerdotal, que estos días sean un renovar nuestro ministerio al estilo de Jesús, y que podamos unirnos en un gran abrazo sacerdotal.

1 comentario:

  1. Gracias por tus palabras carlos...poco a poco debemos esforzarnos por seguir a ese jesus q nos propones..poco a poco sabemos que te esfuerzas por seguir a ese jesus que predicas...abrazandote y pidiendo al Dios de la vida que te mantenga fiel a el...bendiciones jaque y tito

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